26.11.10

godoy toscano o el misterioso caso de las consecuencias desaparecidas

En México somos capaces de desafiar cualquier tipo de lógica.

Entender la razón de ser de las cosas ha ocupado a buena parte de la humanidad. La causalidad ha sido estudiada desde diferentes puntos de vista, en distintos momentos y desde lejanas latitudes. Nos ha interesado encontrar la causa de los problemas y predecir las consecuencias de distintas acciones a la hora de tomar decisiones.

En física, por ejemplo, la tercera ley de Newton nos dice que a toda acción corresponde una reacción de la misma magnitud y en sentido contrario. En la otra esquina del mundo, en la India y desde la metafísica, todo lo que sucede es efecto o consecuencia de actos pasados. Así, el karma define lo que nos sucederá. Una ley más que ha girado alrededor de la causalidad en un terreno distinto es el estudio de las consecuencias no anticipadas (unintended consequences) que se ha utilizado principalmente en la ciencias sociales. 

Entender las consecuencias de los actos ha ayudado a ingenieros a saber cómo y dónde colocar parteolas o cómo cambiar el cauce de ríos; a científicos a demostrar que el hombre viene del mono, ya que como consecuencia del uso del pulgar desarrollamos herramientas, etc; y todo padre de familia trata durante años de explicarle a su hijo que sus acciones tienen consecuencias, que debe responsabilizarse de sus actos. 

En México, sin embargo, existe un fenómeno bastante peculiar que parece desafiar a la lógica misma. Se trata del efecto de las consecuencias perdidas (disappeared consequences) que permite que acciones (ilegales, principalmente) realizadas por ciertas personas (ricas y poderosas generalmente) no tienen consecuencias o peor aún, el efecto de las consecuencias selectivas que le da al actor la capacidad de elegir cuáles consecuencias (enriquecerse, por ejemplo) sucederán y cuáles no (ir a un juicio). Se trata de un triángulo de las bermudas mexicanizado.

Es justamente gracias a estos extraordinarios efectos que en México este año hemos visto casos como el de Godoy Toscano.  El Michoacanazo presenta fuerte evidencia para confirmar la existencia ambos fenómenos. No seré exhaustiva, pero aquí algunas muestras:

Político tiene nexo con el narco à gana las elecciones.
Se gira órden de aprehensión contra político à político consigue amparo.
Policía busca a político desde Junio de 2009 à político toma posesión de diputación en la cámara de diputados.
Partido cobija a presunto compadre de narcotraficantes à no pasa nada.
Se pide desafuero de político à meses sin que pase nada.

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