27.1.10

Si México fuera Sherwood Forest...

Después de tomarme una cervecita en un workshop y estar poco menos de dos horas hablando de política en México, específicamente del PAN y el PRD como partidos de oposición al todopoderoso PRI, empecé a visualizar un bosque. Empecé a ver a México  como un bosque, el bosque de Sherwood específicamente. Por miedo a hacer el ridículo en medio del círculo académico serio en el que estaba, guardé silencio y no compartí mi visión. Pero, ya estando en casa y a solas, me siento cómoda de proponer por escrito este pequeño sueño que tuve hoy por la tarde.

Si México es Sherwood forest, donde gobierna un rey y un puñado de cuatachos, tipo señores feudales que son ricos y poderosos, pero que se encargan de dar al pueblo lo suficiente para (sobre)vivir, ése es el PRI. El PRI que se enriquece a lo bruto, pero sabiendo, como ya decía algún historiador cuyo nombre se me escapa, repartir lo necesario. El PRI le daba la conseción de leche CONASUPO a su compadre, pero el pueblo tenía leche barata...

En este mismo pueblo hay una figura caritativa, que lucha por la justicia y la dignidad: Friar Tuck. Ése, nos quisiera convencer el PAN, son ellos. Mártires políticos que aunque sabían que no iban a ganar, luchaban desde su trinchera pacífica por un México mejor. Si José Antonio (el ponente del workshop) tiene razón, ese no sería el caso, pero en el imaginario colectivo, creo que la idea está bastante bien vendida.

Falta un personaje, y sí acertaron es Robin Hood, bueno, no estaba tan difícil. Se dedicaba a robar a los ricos para dar a los pobres. Qué bonito! dijo Andrés Manuel, justo siguiendo su ejemplo es que yo permití asentamientos en el DF, regularicé viviendas que se establecieron en terrenos de ricos, para que los pobres tuvieran un lugar donde vivir. Un pillo popular, populista diríamos hoy, pero un pillo al final.

En esta versión de Sherwood Forest tropicalizada, como en el original cuento, Robin Hood le roba a los ricos para darles a los pobres, pero también coquetea con la "princesa". Pero, a diferencia de la legendaria historia, la princesa no lo deja todo para ir a vivir con el pueblo, la princesa tiene demandas y el PRD se encuentra queriendo conquistar a dos amores, presiente que necesita a los dos y tiene razón. El PAN tampoco es ese cura desinteresado.

Y así es cómo debería de ser, los políticos están jugando en el trapecio y no pueden "representar" a una sola parte de la sociedad, y mucho menos cuando llegan al gobierno. El gran reto que tienen es que han de representar a todos, o al menos no ir drásticamente en contra de un grupo y al mismo tiempo tener cierta consistencia ideológica. Al final, los estereotipos o los personajes de Robin Hood, el rey o friar Tuck, no alcanzan para descifrar la realidad política del país, por suerte! Aún así fue una buena cervecita y un sueño entretenido.

5 comentarios:

Roberto Reynoso dijo...

Buenísimo! Me hiciste reir y pensar. Además me gusta el nuevo formato del blog. Saludos,

kgm dijo...

"un pulgar arriba" por tener cervezas en workshops.

"dos pulgares abajo" por tener a JA de presentador :P

solo bromeo, me gusto tu post sobre el Banana Sherwood.

abrazo!

p. d. a ver si el sabado se arma algo, no? porque esperar hasta febrero para la platicadisima cena, estaca brown!

mercaditou?

Julene Iriarte Iturbide dijo...

elpollus: gracias, a ver si la burocracia te da un descanso y vienes a Chicago cuando tengamos buen clima, o de menos blogueas algo, no? un abrazo!

Fernando dijo...

los looney tunes y la alianza electoral en oaxaca...
http://www.youtube.com/watch?v=NWSEQFFW4Nw

yo dijo...

jaja, pues si, que horror que los looney tunes sean lo mas parecido a nuestros politicos estos... Habra que ver que onda con las alianzas, como sera la cruza de pato con puerco? jaja!