Normalmente, matar dos pájaros de un tiro es algo bueno, tienes más resultados con un mímino de esfuerzo. Este no es el caso de la película Death at a Funeral que saldrá dentro de poco en Estados Unidos. Tan mala es que no necesito verla para escribir cómo de un jalón deshace una excelente película inglesa y el trabajo de tanta gente que, como Bill Cosby, han estado haciendo para cambiar las persepciones de la raza afro-americana (hacia adentro y hacia afuera de la comunidad).
La original Death at a Funeral es una excelente película inglesa, dirigida por Frank Oz. Es una comedia que representa lo mejor del cine dominguero: no por que no quieras sufrir o pasar horas pensando acerca de la película que viste signinfica que tengas que ver la clásica pésima película que alguana estrella hizo en un fin de semana para ganar algo de dinero (ie. ghost of girlfriends past). Death at a Funeral es orignial, divertida y no se toma demasiado enserio. Cine, no de los óscares, tal vez, pero sumamente necesario.
Bill Cosby ha trabajado durante años en cambiar la imagen estereotípica de los negros en Estados Unidos. En su programa pesentaba una familia afro-americana adinerada, conservadora y educada, sin dejar de ser una comedia. En los últimos años ha llevado a cabo una campaña para que los padres eduquen mejor a sus hijos desde edades tempranas.
La nueva Death at a Funeral no es una comedia es una "slapstick comedy" que poco tiene que ver la gracia de la original. En el corto que vi, no hubo una sóla escena que no exagerara al máximo la situación complicada explicando de más al público por qué deberían reirse, poniéndome incómoda sin soltar ni una sonrisa. Era una oportunidad dorada tomar ese guión y adaptarlo a una familia afroamericana en Estados Unidos, pero resultó ser una confirmación más de los esteotipos; no sólo de cómo se ven los negros en la pantalla, sino de qué deberían querer ver los afroamericanos en el cine.
La mejor parte de una comedia es que sea inteligente (witty), y lo que falta en los medios de comunicación en Estaods Unidos es enseñar esa faceta de la comunidad afroamericana. Neil LaBute, director de la nueva película deja ir la oportunidad de matar dos pájaros de un tiro en el sentido tradicional, haciéndolo en el sentido literal. Nada queda, estoy segura, de la inteligente comedia inglesa, y la oportunidad de representar a una comunidad de manera diferente queda perdida por ahora, ahogada en las típicas bromas y actuaciones de siempre.
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